Comprar un décimo de la Lotería de Navidad es una tradición que, año tras año, miles de españoles hacen. Por desgracia, pocos han sido los afortunados que conocen las gestiones legales a realizar si resulta agraciado con un premio.
Décimo compartido
Si se tiene un décimo premiado y a la vez compartido con varios familiares o amigos, pueden surgir problemas a la hora de repartir el premio. Lo recomendable es que los compradores firmen el documento con los datos personales de cada uno y el dinero aportado por cada décimo; también, se pueden realizar copias de los décimos que después serán firmadas por todos los participantes. La organización de consumidores OCU recuerda que un décimo de Lotería es ‘un documento al portador’ y que, el premio lo recibe, en principio, quien lo tiene en su poder. Por otro lado, cuando se comparte un premio con la pareja es conveniente saber que:
- Si el matrimonio está en bienes gananciales, se repartirá el premio al 50% para cada uno.
- Si, por el contrario, es en régimen de separación de bienes, el premio pertenece a quien lo ha comprado, salvo que pueda acreditar que se ha comprado a medias.
Cómo cobrar un décimo
- Identificar al ganador o ganadores, si los hubiese, y su porcentaje de participación.
- Las entidades bancarias abonan el premio entero (tras descontar el 20% de los impuestos correspondientes) en la cuenta de la persona que ya es titular. Es un error cobrarlo todo sin identificar a los otros participantes, ya que al repartirlo se podría interpretar como donación, lo que obligaría al pago de impuestos correspondientes.
- Si el premio es menor a 2.500 euros, podrás cobrarlo en cualquier punto de venta de la red de Loterías.
El pellizco de Hacienda
Hacienda retiene automáticamente en los premios superiores a 2.500 euros un 20% de la parte del premio que supere esa cantidad, por cada décimo, no por cada persona agraciada. Es decir, se descuenta el impuesto y después se reparte la cantidad neta entre los participantes. El premio no se declara en el IRPF, los rendimientos que genere, si. En el caso de los premios compartidos, la Agencia Tributaria reconoce a un beneficiario único que será el encargado de identificar a cada ganador y su porcentaje correspondiente de participación. Este gestor del cobro también será el encargado de repartir el dinero entre los titulares de las participaciones. Por último, si el premiado quiere regalar una parte del dinero a sus familiares, el beneficiario ha de tener en cuenta que este importe tendrá que tributar bajo el paraguas del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que gestiona cada Comunidad Autónoma.